Va un relato un poco experimental en cuanto a la forma usada para desordenarlo. Creo que quedó más o menos bien.
Solo, en mitad de la nada. Se acerca una tormenta. No sirve
de nada. No puedo soportarlo. Estoy cubierto de sangre. Atrapado. No hay
salida. El gigante cae.
Un dolor insportable. La carne se va desgarrando. Todo se
desvanece. Un árbol se erguía en mitad del monte. Saco un cuchillo de mi
cinturón. Sigue lloviendo. No queda sangre en mi cuerpo. Pesa demasiado. Moriré
atrapado. Oscuridad. Los últimos pedazos de carne se desprenden. El teléfono no
tiene señal. La tierra húmeda se revuelve bajo mi cuerpo. Más oscuridad. La
sangre brota.
Mis piernas sepultadas. No puedo parar, no puedo. Me
arrastro por el lodo. La lluvia cala hasta los huesos. Me encuentro atrapado.
Oscuridad fría, oscuridad de sangre. Carne muerta. No puedo moverme. Dejo un
reguero de sangre tras de mí. Oscuridad fría y húmeda. Como una rama seca.
Moriré de todas formas. Oscuridad interminable. Ahogado. Los
rayos iluminan el cielo. Me arrastro. No siento mis piernas, están separadas de
mi cuerpo. Todo se va poniendo negro. Tengo que hacer algo. Un rayo golpea. Sin
escapatoria. Nadie contestará.
Golpes y más golpes. El cuchillo se hunde en la carne. Ya no
veo nada. Sigue lloviendo. Dolor insoportable. Ya toco hueso. No puedo salir de
aquí. Se quiebra. La lluvia sigue cayendo.
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