Drogas. Datos importantes que la gente no suele saber. 0: Introducción

Esta serie de textos tiene un objetivo bastante sencillo, como indica el propio título: dar a conocer información objetiva y útil sobre las drogas que, en medio de una maraña de informaciones ocultadas, leyendas urbanas y falsas creencias, normalmente la gente no conoce. Es el resultado de la ilegalización de una gran parte de las drogas, lo que dificulta su estudio bajo criterios científicos, con la mezcla de campañas mediáticas que buscan demonizar las drogas para ahuyentar a la gente (sin éxito, evidentemente). Estas condiciones son un caldo de cultivo para que reine el desconocimiento incluso sobre sustancias que se ven en el día a día.

Estos textos son una simple adaptación de hilos que he ido escribiendo en Twitter, a raíz de las peticiones de la gente, que a su vez derivan de un primer hilo que hice tras leer un tweet de la cuenta de la Guardia Civil repleta de datos falsos. Viendo que el dinero de nuestros impuestos se gasta en difundir bulos, me pareció correcto hacer un hilo para desmentirlos, y ahí fue naciendo esta idea. A raíz, además, de ciertas políticas de Twitter bastante cercanas a la simple censura, he decidido que esa información peligraba un poco allí y necesitaba ser adaptada a otros medios. Mi blog parece un buen sitio. Es un recurso distinto, pero puedo adaptar los hilos a este formato y de paso corregir algunos errores y ordenar mejor algunas cosas, integrando apuntes que se me ocurrieron a última hora y en Twitter tuve que añadir con posdatas en su sitio correcto.

A lo largo de mis estudios y experiencias con las drogas, me he convencido de que suministrar información objetiva es la mejor forma de reducir los daños y problemáticas que pueden aparecer con su consumo. Esto nos devuelve al primer párrafo, y es que hay otras posturas que consideran que es mejor dar información muy manipulada, contando sólo el lado negativo de las drogas, para que la gente evite acercarse a ellas. Sin embargo, creo que está sobradamente claro que esto ha sido un fracaso rotundo: la gente consume drogas por mucho que las demonicen.

Con ese discurso se consiguen dos cosas: Quienes no consuman la droga no entenderán por qué alguien la consume. Eso genera incomprensión y divide a la sociedad, haciendo que quienes consumen drogas se vean empujados a la exclusión y a la marginalidad. Por otro lado, quienes la consuman sabrán que lo que se está diciendo de las drogas es mentira y pensarán que los efectos negativos reales también son mentira. Eso genera precisamente el peligro que dicen querer evitar.

En resumen, esta serie de textos no pretenden incitar o promover el consumo de drogas, sino proporcionar información objetiva y útil al respecto, que es precisamente la mejor forma de reducir los daños producidos por las drogas y salvar vidas. Los “capítulos” serán los siguientes, con sus respectivos links para que esta entrada sirva de índice:

1.         Marihuana.

2.         Hachís.

3.         Cocaína.

4.         Opio y derivados.

5.         Anfetaminas.

6.         MDMA.

7.         LSD.

8.         Alcohol.

9.         Setas alucinógenas.

10.       Ketamina.

11.       DMT.

12.       Tabaco.

13.       Tranquilizantes.

14.       Enteógenos.

15.       Estimulantes naturales.

16.       Poppers y otros inhalantes.

17.       Nuevas drogas de diseño.

18.       Apuntes finales.